El viernes 19 de febrero se aprobó la iniciativa preferente de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) por la Cámara de Diputados. Ahora pasará al Senado para su discusión y posible aprobación.
El objetivo es fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y garantizar su confiabilidad, para ello, hay 5 cambios que establece la ley:
Modifica el mecanismo de despacho de las centrales eléctricas, para quedar en prioridad la energía producida por las hidroeléctricas y la energía generada en otras plantas de la CFE.
Prevé que los permisos de las nuevas centrales de generación quedarán sujetos a los criterios de planeación del Sistema Eléctrico Nacional.
Amplía las reglas para el otorgamiento de Certificados de Energía Limpia, para que no dependan de la propiedad ni de la fecha de inicio de operaciones de las centrales eléctricas.
Elimina la obligación de CFE Suministro Básico de comprar energía por subastas para que pueda adquirir su energía también con subsidiarias de generación de CFE.
Obliga a la Comisión Reguladora de Energía a revocar los permisos de autoabastecimiento obtenidos mediante actos de fraude a la ley.
Por lo tanto, a pesar de que todo parece indicar que el Senado aprobará esta reforma de la LIE, aún se ve muy complicado que la iniciativa sobreviva el escrutinio de la Suprema Corte de Justicia. No obstante, el panorama es estable para la Generación Distribuida (proyectos menores a 500kWp) y se espera un dinamismo y crecimiento muy importante en 2021 para este segmento en aplicaciones residenciales, comerciales e industriales.